El acoso escolar o bullying es cualquier forma de maltrato (psicológico,
verbal o físico) producido por un abuso de poder y fuerza, dirigido siempre a
la persona más “débil”. El maltrato debe producirse de forma reiterada a lo
largo de un tiempo determinado y es claramente deliberado, sistemático y
repetitivo. Aquí podéis consultar 15 recursos
para combatirlo en el aula.
Es muy importante diferenciar los conflictos entre iguales del acoso
escolar. Para considerar acoso como Bullying deben cumplirse
simultáneamente tres criterios:
Un desequilibrio de poder, situación de desigualdad de poder, ya sea a
nivel físico, psicológico o social
Debe existir intencionalidad y/o repetición. No son situaciones
aisladas, tienden a repetirse en el tiempo lo que implica que la víctima sea
blanco de futuros ataques
Se maltrata a las personas que piensan tienen un menor grado de
indefensión, los menos fuertes
Uno de cada 10 alumnos asegura que ha sufrido algún tipo de acoso
escolar. Denunciarlo
no es tan sencillo, por este motivo la empresa Deset Technological Solutions SL
junto con el Equipo D-letras decidimos crear una herramienta de evaluación para
detectar el acoso escolar. Queríamos que fuese algo sencillo y que
pudiese ser detectado a través del juego. Así surge The Buddy Tools.
El test es un software informático que se realiza a través de un
ordenador o tablet, lo que lo hace aún más llamativo. Los alumnos lo viven como
un juego desde el primer momento ya que deben crear su usuario y
personalizarlo. Tras este primer paso responden a una serie de cuestiones
relacionadas con el grupo clase. El test dura unos 10 minutos y nos permite
obtener una “radiografía social” (sociograma) del aula y detectar posibles casos
de acoso. Nos ofrece informes individuales y grupales, aportando datos sobre la
sociabilidad del grupo, rendimiento escolar, datos psicosomáticos, alumnos más
elegidos, rechazados, posibles acosados y acosadores.
Se ha puesto en marcha en varios centros escolares obteniendo muy buenos
resultados. Podemos hablar una fiabilidad del 90-95%.La utilización
del software hace que los alumnos respondan con mayor sinceridad, sin problemas
de confidencialidad y/o miedos al hacerlo en ordenador y a través del juego.
Además, la herramienta permite comprobar indirectamente la sinceridad de las
respuestas de los alumnos, para reforzar la fiabilidad y validez del test.
Cuando un centro detecta un caso de acoso debe
poner en marcha un protocolo de actuación específico. The Buddy Tools junto con
el informe que aporta, ofrece una serie de pautas para profesores, padres y
alumnos. A continuación os dejamos algunas de las pautas que pueden encontrar dentro
de la herramienta.
PAUTAS DE INTERVENCIÓN PARA PROFESORES Y ORIENTADORES
-Si detectas un comportamiento de acoso se tiene que intervenir
inmediatamente,parando la situación lo antes posible para evitar que las agresiones se
agraven o vayan a más
-Observar las relaciones que se establecen en el aula
-Estar atentos a los cambios en el rendimiento de sus alumnos, tanto
en cuanto a atención en clase como a sus resultados, ya que son uno de los
índices más claros de que algo no funciona como debiera
-No restar importancia a las manifestaciones o denuncias de los
alumnos. Escucha con respeto y evita decir cosas como “son cosas de
niños”, “no es para tanto”
–Formación del profesorado para el conocimiento, detección y
actuación ante situaciones de acoso escolar
-Crear un protocolo de actuación, que informe de las
medidas que el centro va a adoptar y cómo se va a abordar dicha situación
–Solicita la colaboración de las familias. El acoso escolar es
responsabilidad de todos, y todos debemos ser parte activa de la solución. Por
ello, es recomendable informar a los padres mediante charlas o talleres e ir
pautándoles para que sepan cómo han de actuar.
–Vigilancia por el profesorado en aquellos lugares donde pueda
producirse el supuesto acoso, para recreo, comedor, y otras zonas de
riesgo (cuartos de baño).
–Hablar con la víctima garantizándole su protección y seguimiento del
problema e informarle de los pasos que se van a dar.
–Seguimiento diario por parte de un profesor/a de confianza para
el alumno, por mayor empatía o cercanía comunicativa y/o afectiva.
-Hablar en clase del tema. El acoso escolar no puede ser un tema
tabú. Se recomienda hacer hincapié sobre la necesidad de decirlo si
algún alumno detecta problemas y remarcar que comentar un suceso no significa
“ser un chivato”. Las tutorías pueden ser un buen momento para esto.
–Tratar el tema a través de las tutorías e introducir temas
de educación en valores, convivencia, compañerismo, civismo, no agresión;
respeto y tolerancia.
–Establecer consecuencias. Hablar con los alumnos y
expresarles las medidas que se tomarán y cómo se reaccionará cuando ocurra
alguna agresión.
–No usar la mediación entre iguales como herramienta de resolución de
la situación de violencia o forzar artificialmente, que se den la mano, que se
pidan perdón…
El acoso escolar marca la vida de las víctimas, afecta a la salud
física, al bienestar emocional y al rendimiento académico de los niños. Deja una huella imborrable en
la vida adulta de las personas que lo han sufrido: genera inseguridad,
dificultad para confiar en personas, baja autoestima…
Entre todos podemos conseguir que la escuela sea un lugar seguro.
¡Trabajemos para conseguir una escuela segura, basada en el respeto!
Por: Cristina Martínez Carrero
Fuente: http://www.educaciontrespuntocero.com/author/cristina-martinez-carrero
0 comentarios:
Publicar un comentario